En un mundo donde los regalos materiales abundan, es importante reflexionar sobre la calidad de nuestras expresiones de amor. ¿Realmente fortalecen los vínculos emocionales? ¿Contribuyen a una conexión más profunda? La psicóloga, mentora de propósito de vida y escritora con 15 años de experiencia, Isabel Vargas Calero, nos ofrece una perspectiva sobre este tema en el marco del Día de la Madre.
Según la experta, los regalos sentimentales o personalizados, aquellos que reflejan una consideración consciente de los gustos, necesidades y deseos de nuestra madre, tienen un impacto mucho más significativo en la relación. Además, resalta que son los pequeños detalles del día a día los que demuestran que estamos presentes, que nos importa su bienestar y que la amamos incondicionalmente.
Por otro lado, Vargas Calero nos recuerda que el tiempo de calidad y las experiencias compartidas son regalos invaluables. Estas vivencias profundas no solo fortalecen los lazos emocionales entre madre e hijo/a, sino que también pueden ser catalizadores de sanación y liberación para ambas partes. «Una relación se alimenta en amor, aceptación, consideración, admiración», enfatiza la psicóloga. Es a través de la conexión genuina, la escucha activa y el compartir momentos significativos que expresamos nuestro amor y aprecio hacia nuestras madres, sin necesidad de recurrir a la compra de artículos físicos.
¿Y qué hay de los regalos que promueven el autocuidado? La experta nos invita a reflexionar sobre la importancia de conocer a nuestra madre en un nivel profundo. Al comprender sus gustos, intereses y necesidades, podemos seleccionar regalos que realmente promuevan su salud mental y emocional. Se trata de comunicar de forma asertiva que nos preocupamos por su bienestar integral.
Por último, la psicóloga nos motiva a buscar una relación con la figura materna que sea una fuente de vitalidad. Esto implica comprender el propósito de nuestro ciclo relacional y buscar ayuda si es necesario para sanar heridas pasadas y construir conexiones más significativas.
En el Día de la Madre, recordemos que más allá de los regalos materiales y las celebraciones superficiales, lo que realmente importa es el amor genuino, la conexión auténtica y el tiempo compartido. Celebremos a nuestras madres de una manera que fortalezcamos los lazos que los unen.
Experta: Isabel Vargas Calero