Es responsabilidad de cada uno abordar los desafíos de preservar el agua de manera urgente y adoptar medidas sostenibles para garantizar la disponibilidad de agua limpia para las generaciones futuras.
No es un secreto que los principales desafíos que enfrentamos en términos de escasez y contaminación del agua están relacionados con la creciente demanda de agua debido al aumento de la población, además la actividad industrial está ejerciendo una presión significativa sobre los recursos hídricos disponibles, sin mencionar la contaminación del agua por desechos industriales, agrícolas y domésticos, la cual está afectando la calidad del agua y poniendo en riesgo la salud de las personas y el medio ambiente.
A continuación vamos a mencionar algunos consejos de cómo se puede tomar acción en nuestro día a día para conservar el agua, podemos empezar por reducir el tiempo en la ducha, cerrar el grifo mientras se cepilla, reutilizar el agua del último ciclo de la lavadora, reparar cualquier fuga de agua en grifos tuberías o inodoros, recolectar agua lluvia para regar plantas o jardines, usar productos de limpieza y cosméticos biodegradables para evitar la contaminación del agua. Estas son algunas ideas pero cada pequeña acción cuenta para conservar el agua y reducir nuestra huella hídrica.
Por su parte, Angélica María Carvajal Soto, Ingeniera Ambiental de la Universidad Nacional, afirma que: “existen algunas tecnologías innovadoras y prácticas de gestión del agua que están ayudando a abordar los desafíos actuales de escasez y contaminación, entre ellos podemos destacar: Tratamiento y reutilización de las aguas residuales para uso no potables como por ejemplo el uso agrícola o sistemas de refrigeración, sistemas de captación de agua lluvia que recolecten y almacenan el agua para su posterior uso, sensores y sistemas de monitoreo que ayuden a optimizar el uso del agua y prevenir desperdicios, Prácticas agrícolas que utilizan tecnologías para optimizar el riesgo y reducir el uso excesivo de agua en la agricultura y desalinización del agua de mar para convertirla en agua potable lo que es especialmente útil en regiones con escasez de agua dulce. Aseguró la Ingeniera Ambiental.
Aquí algunas recomendaciones para que empieces a adoptar una serie de acciones responsables y sostenibles.
-Reducir el consumo de agua: Instalar dispositivos de bajo consumo en hogares y negocios, reparar fugas de agua y ser conscientes del uso que hacemos diariamente.
-Reutilizar el agua: Implementar sistemas de recolección de agua de lluvia para usos no potables como riego o limpieza.
-Reciclar correctamente: Disponer adecuadamente de productos y materiales reciclables para reducir la contaminación de fuentes de agua.
-Conservar los ecosistemas acuáticos: Proteger ríos, lagos y océanos mediante la conservación de cuencas hidrográficas y la restauración de hábitats naturales.
-Promover prácticas agrícolas sostenibles: Implementar técnicas de riego eficientes y prácticas agrícolas que minimicen la contaminación del agua con productos químicos.
-Educación y sensibilización: Educar a la comunidad sobre la importancia de conservar el agua y promover el uso responsable desde temprana edad.
-Apoyo a políticas de gestión del agua: Participar activamente en iniciativas locales y apoyar políticas que promuevan la gestión sostenible del agua y la protección de recursos hídricos.
Estas acciones no solo contribuyen a la conservación del agua, sino que también protegen el medio ambiente en su conjunto, asegurando un futuro más sostenible para las generaciones venideras, recuerda que desde simples cambios en tu rutina hasta decisiones conscientes, contribuye a preservar este recurso esencial para la vida.