Sin duda, al permanecer más tiempo en casa, utilizamos más los electrodomésticos, gastamos más agua, y se incrementa la preparación de alimentos. Así las cosas, es clave empezar a implementar estrategias para controlar que los valores a pagar no aumenten.
Estas son algunas ideas que te compartimos en Lazos delagente, para disminuir el consumo de los servicios públicos, y así evitar que los recibos lleguen un poco más elevados a final de mes.
Ahorro de energía
¡Desconecta después de usar! Procura no tener todos los electrodomésticos, cargadores, y demás dispositivos conectados si no los estás utilizando, ya que esto igualmente consume energía.
Ahorra energía y utiliza más la luz del día. Si puedes trabajar, o realizar actividades aprovechando la luz solar, estarías ahorrando energía eléctrica. También es importante apagar las luces que no estás utilizando.
Ahorro de agua
Se puede ahorrar agua más fácil de lo que imaginas. Duchándote más rápido, cerrando la llave al lavarse las manos, revisando que no haya goteras en todos los grifos de la casa. Para lavar la loza, podrías enjabonar primero platos, cubiertos y ollas y luego sí enjuagarlos.
En el baño, por ejemplo, puedes reusar el agua de la ducha en el inodoro. También puedes reutilizar el agua de la lavadora para lavar patios o antejardines.
En cada hogar, es fundamental implementar estrategias para controlar al máximo que los valores a pagar no se eleven demasiado.
Ahorro de gas
El tamaño de las ollas influye: Entre más pequeña, más rápido se calentará la comida, por lo que se requerirá menos gas.
Prepare ciertas cantidades: Muchas familias prefieren la comida fresca y recién preparada, pero hay alimentos que se pueden preparar para toda la semana y no cambian de sabor. Además de ahorrar gas, también ahorrarás tiempo que puedes usar en otras actividades.